Imaginemos un aula sin niños y sin niñas, vacía, Podemos observar
detenidamente como esta ocupado el espacio, que tipo de decoración presenta, cómo es
la distribución de las mesas, de los materiales… Con sólo este examen
podríamos aventurar a qué modelo metodológico responde este aula. Si en nuestra
aula vacía las mesas están colocadas de una en una, podríamos
suponer que prima el trabajo individual, ahora bien, si las mesas están
colocadas en grupos de 5 podríamos deducir
que se trabajo en equipo. El espacio nos habla de lo que ocurre en el
aula, y de alguna manera propicia una forma de enseñar y de aprender. La
organización y distribución del espacio condiciona el funcionamiento del aula,
facilita o dificulta las interacciones,
el movimiento, la autonomía y la relación con el mundo fuera del aula.
El ambiente físico está formado
por los muebles, las paredes y por los materiales
que hay en el aula, estos pueden estar estructurados de forma que prime
escuchar a la maestra, trabajar en silencio, ver todos la pizarra, con mesas y
sillas suficientes para que todos puedan estar sentados a la misma vez,
haciendo la misma actividad. O puede estar estructurado de forma que facilite
el trabajo en pequeños grupos, las conversaciones, los contactos, que permita
sentarse a solas para leer el cuento que mas te gusta o que permita a la
maestra trabajar con un pequeño grupo cómo vamos a realizar la exposición oral
de los animales mientras otros están realizando “otros trabajos”
Estamos acostumbrado a asistir a aulas de infantil en donde las niñas y
los niños tienen un sitio asignado, una percha, incluso en muchas se escribe el
nombre de cada uno en su sitio...Este tipo de agrupamientos es
adecuado para trabajar individualmente, no hablar con los compañeros y no
distraerse, responde a una concepción del aprendizaje en el que los niños y
niñas aprenden con ejercicios de repetición, en donde el saber nos viene
transmitido por el docente, en donde el aprendizaje es una actividad en
solitario y en aislamiento. Sin embargo, sabemos que el aprendizaje implica
relacionarse con el mundo, establecer múltiples relaciones, interaccionar con
el docente y con otros iguales, interaccionar con los distintos elementos del
aula, difícilmente interaccionaré con nadie si no me puedo mover de mi sitio. Un
aula con 20 fichas iguales en el tablón o con 20 cuentos iguales en la biblioteca,
poco motivará al alumnado a que investigue, investigar implica que la situación
que se nos presenta nos es desconocida, que es tan compleja como para tener que
averiguar que es y cómo funciona. Rodear o colorear de rojo un círculo, dudo
mucho que le interese a nadie por pequeño que sea. Los docentes sabemos muy
bien escribir en nuestras planificaciones: investigar, aprender por
descubrimiento, crear conflicto... pero para ello los niños y niñas necesitan levantarse de su sitio y explorar el
mundo que les rodea.
Cuando pienso en las aulas de
infantil pienso en un aula en donde los niños y las niñas interaccionan,
buscan, se equivocan, aprenden. La organización del espacio dividida en zonas o
rincones, permite estructurar el espacio del aula con distintas funciones:
zonas para compartir una lectura, zonas con materiales para manipular libremente,
zonas para recrear situaciones de la vida diaria: el médico, la tienda, la
zapatería...
Los rincones son una propuesta
metodología que parte de una organización funcional del espacio, que
organiza el trabajo en pequeños grupos, favorece la interacción y el
intercambio entre las niñas y los niños, así como la autonomía al hacer
al alumnado participe y responsable de su propio aprendizaje. Nos permite
adaptarnos a la diversidad de necesidades e intereses de los alumnos y
alumnas del aula con propuestas de actividades abiertas y flexibles que permiten que el docente atienda a un pequeño grupo mientras los demás hacen “otra
cosa”.
Volvamos a nuestra aula vacía del
principio y dejémosle llenarse de risas, murmullos, preguntas, inquietudes,
afectos y sorpresas ante todo un mundo por descubrir y como docentes acompañémosles
en este camino de investigación propiciando las oportunidades, ayudándoles a
cuestionarse, convirtiendo así nuestra aula en un lugar de vida.
Tienes toda la razón. El espacio nos habla de lo que ocurre en un aula. Hace unos años, bueno mejor dicho, muchos años y no es un cuento me ocurrió a mí. Un conocido Asesor, ahora profesor de la UAl me dijo: ¡¡Vaya estoy sorprendido! Un aula desordenada!!¿No crees que hay demasiadas cosas? ¿No crees que está todo muy cerca de los niños? A lo que yo le contesté. Al primer comentario le dije: Bueno, aparentemente desordenada, pero si observa mejor verá que si hay un orden, un orden consensuado entre los niños y yo. Y en segundo lugar le contesté (bueno también pensé otras cosas que no le dije): Y si no es así, ¿como quiere usted que puedan elegir con qué jugar de forma autónoma? ¿còmo se harán responsables de sus elecciones? y... No. No creo que haya demasiadas cosas, creo que todo lo que hay es interesante, útil, práctico, les da oportunidad a todos de probar diferentes retos y sirve para la vida.
ResponderEliminarA veces en las aulas impera el orden de la maestra, el criterio de la maestra, la organización de la maestra, pero... una aula no la forma solo la maestra. Las criaturas son imprescindibles y para que vivan en un aula debemos de consensuar con ellas y pactar y jugar y equivocarnos y corregirnos y ayudarnos y reirnos y emocionarnos juntas... Eso es para mi un aula viva. Y tener en cuenta sus ideas para organizar el aula también cuenta o al menos yo también lo considero importante. Por ello desde el principio mi función es convertir mi aula en una aula de vida y de oportunidades y en eso estamos. Espero conseguirlo. Un abrazo desde aula de infantil.
Ayyyy que esta entrada me la había perdido.
ResponderEliminar¡¡¡¡ Haz el favor de ponerlas en mi muro de facebook!!!!!!!
Un aula viva, que bien suena, un aula que no mate la creatividad, el ansia de hacer preguntas, a veces incluso, incómodas, el ansia de aprender el mundo.
Un aula con pocos espacios para el silencio, un aula donde reír sea fácil, un aula donde ser diferente sea lo normal.
Utopía que bien suenas!!!!!!!!!!